Ser madre.
No soy madre por haber tenido durante 9 meses un ser dentro de mi cuerpo,
aunque no cambio por nada eso que sentí en cada embarazo, que me hizo tener más adrenalida que de costumbre.
No soy madre por proteger una cosita a pesar que muchos se los quitan por temor a ser distintos,
aunque el instinto animal me llevó a tener garras a pesar de mis uñas cortas.
No soy madre por parir con dolor,
aunque amé ese instante en el que me pusieron tu cuerpito sobre el pecho.
No soy madre por tener agallas,
aunque si fuese por mí doy mi vida por vos.
No soy madre cuando te canté canciones de cuna,
aunque sea pésima cantante, tu carita brillaba con mi voz noche tras noche.
No soy madre por haberte dado la teta,
aunque sea ese mágico momento el que nos unía en comunión profunda.
No soy madre por contarte cuentos,
aunque mi imaginación volaba contigo al inventarte aventuras de guerreros y princesas.
No soy madre por el simple hecho de que se me caratule como tal,
aunque ese título me quede grande, me encanta tenerlo.
No soy madre por cargarte a upa cuadras y cuadras,
aunque me fascina ser tu auto, y tu cuerpo mi combustible.
No soy madre por prepararte la comida que necesitas dependiendo las etapas de tu vida y terminar toda enchastrada,
aunque prefiero esos diseños de indumentaria caseros sobre mis ropas.
No soy madre por mantenerte prolijo y limpito,
aunque me encantaron las carreras que hicimos en la playa, despeinados, desprolijos, desconectados de lo común.
No soy madre por lidiar con tu carácter,
aunque debo decirte que acepto eso que tu abuela me dijo hace tiempo: «cuando seas madre comprenderás por qué te he dicho que me sacaste canas verdes».
No soy madre por estar desvelada toda la noche sabiéndote fuera en una fiesta,
aunque te soy sincera, me hubiese gustado acompañarte como mujer invisible.
No soy madre por ofrecerte mi hombro y oídos cuando rompiste en llanto luego de tu primer desamor,
aunque hubiese agarrado a ese muchacho /a por la ropa y levantado del suelo sólo con la mirada, haciéndole entender que con mi pequeño no se juega.
No soy madre por estar a tu lado,
aunque no se lo que sería de mí en otro lado.
No soy madre por comportarme como una loca cuando no me haces caso,
aunque lo admito, no se lo que es estar en otro estado…..lo siento.
No soy madre porque sí,
soy madre porque así lo decidí,
porque si hubiese sido que mi cuerpo no era apto para sostenerte desde que comenzabas a formarte, te hubiese buscado, sin dudarlo,
y en algún momento te encontraría, pequeño, un poco crecido, con edad incierta, nos encontraríamos,
nuestros caminos se cruzarían y se entrelazarían con un nudo imaginario tan fuerte y potente que nunca nadie nos separaría.
Por eso soy madre,
porque así lo siento,
porque así te amo,
te amo desde lo más bajo del suelo, hasta Dios ida y vuelta infinitamente, incondicionalmente.
Ana Alemán
@Ani_Aleman