¿Sapo o príncipe azul? Mejor los dos…..
¿Quién dijo que
las mujeres somos inconformistas? ¿Será cierto eso de que si tenemos A queremos
Z y por el contrario cuando logramos tener a Z queremos A?
La realidad es
que la vida siempre nos logra poner en situaciones como esta y nosotras
respondemos como pez en el agua a esto de que nunca estamos conformes con lo
que tenemos. Sería tan lindo que cada situación cambiase de estado cuando
nostras queramos, ¿No les parece?
Hay miles de
anécdotas de este tipo, cada una de nosotras las vivimos a diario, puede
comenzar en la niñez cuando tenemos una muñeca y de golpe queremos jugar con
los autitos de nuestros hermanos varones y ni hablar de la adolescencia cuando
todo es una paradoja constante. Ese mar de hormonas que diariamente nos están
jugando una mala pasada, que muchas veces están a nuestro favor y muchas otras
no tanto, todo esto y sobre todo, nuestra condición de mujer, hace que cada
cosa que tengamos no la disfrutemos y cada otra que no está a nuestro alcance,
la añoremos.
Cuantas veces queremos hacer dieta y no aguantamos esa restricción de cosas ricas pero cuando encontrás algo rico y sano como unos Twistos volves a encontrar el equilibrio
Vamos a otro ejemplo más claro, quien de nosotras no ha salido un sábado a la noche con sus
amigas dispuestas a romper la noche cual amazona suelta en la ciudad y en lugar
de romper la noche terminamos paradas en la barra mirando el reloj queriendo
estar en casa abrazadas con el hombre que amamos mirando pelis románticas y
comiendo unas ricas Twistos una tras otra sin parar.
Esa es nuestra
flamante, valiosa y maravillosa vida, tan emocionante como chata, tan frágil
como fuerte, tan emocional como superflua, tan extrema como aburrida, pasamos de las emociones mas impensadas a no querer
levantarnos de la cama, orgullosamente, todos estos altibajos nos hacen mujer,
sin nosotras no existirían ni el sapo, ni el príncipe, y tanto uno como el
otro, no podrían vivir sin nosotras. ¿No les parece?
Cuantas son las veces queremos un Príncipe y otras cuantas deseamos que se convierta en sapo o no les pasa eso aveces
¿No es
bellísimo ser mujer?, sin lugar a dudas, si volviera a nacer y pudiera elegir
mi sexo, creo que quedó más que claro cuál erigiría.
¿Ustedes?
Les dejo este comercial que tiene mucho que ver con lo que hablamos, queremos príncipe o sapo?
https://www.youtube.com/watch?v=o9vNr4QHE1E