Piernas pesadas: ¿cómo proteger sus venas en el trabajo?
Algunos trabajos son claramente «anti-ergonómico», es decir, que no se adaptan a la fisiología del buen funcionamiento del sistema venoso …
Por eso es que hay que hacer hincapié en la prevención.
El trabajo es salud … No estoy tan seguro! 40% de los empleados son víctimas de trastornos venosos, cifra que incluso puede superar el 80% para
determinadas profesiones …
Piernas pesadas por estar mucho tiempo de pie, dificultando el retorno de la sangre venosa al corazón.
Varios estudios han puesto de manifiesto lo que ahora sabemos respecto de los trastornos venosos pues no sólo están relacionados con el
envejecimiento, sino también con el tiempo pasado en situaciones de trabajo anti-ergonómicas (Dr. Ángel Mezzadri).
Podemos decir que en la aparición de la insuficiencia venosa en el trabajo influyen:
• permanecer de pie y / o ambiente cálido siendo, del 75% responsable de la enfermedad,
• la cuarta parte restante se relaciona con el «hábito» de la persona (sobrepeso, herencia, etc.).
El trabajo ya no se considera un factor agravante para la insuficiencia venosa, sino como un factor desencadenante, incluso si la enfermedad es el resultado de la reunión del tipo de trabajo y la herencia genética.
No hay manera de minimizar el problema, si no se tratan rápidamente los primeros síntomas (dolor, hinchazón, pesadez, entre otros), los que si se dejan progresar, pueden llevar a una etapa avanzada, con los
trastornos para la salud y social que conllevan.
Prevención individual
Para lograr una mejor circulación de la sangre, hay actuar en dos niveles.
En primer lugar reducir los factores agravantes como, el desequilibrio hormonal, sobrepeso, la ropa que aprieta demasiado (especialmente el estómago y las piernas).
Segunda, todas las maniobras que promueven el retorno venoso: senderismo, el ciclismo, la postura, etc.
En el trabajo, movimientos posturales activos que ayuden al retorno venoso. Si usted está sentado, flexionar los pies, cómo si estuviese “bombeando”. Otro ejercicio, levántese cada 20-30 minutos y
camine aunque sea una vez alrededor de su escritorio.
Si usted trabaja de pie, párese en puntas de pie varias veces seguidas durante 3 minutos.
Además de estos ejercicios, no dude en realizar una consulta, aunque más no sea de control con un especialista en Flebología certificado.
Ahora se cuenta con tratamientos médicos, que pueden mejorar el tono de las paredes de las venas y de ser preciso otros tratamientos cuyos procedimientos hoy, en su mayoría son ciento por ciento ambulatorios.
Dr. Ricardo M. Gruz y equipo
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