Cuantas de nosotras sentimos alguna vez el sentimiento de «me veo gorda», «salí mal en una foto», «nada me queda bien», «el lunes arranco la dieta» y miles de frases que simbolizan más que un mal aspecto de nuestra imagen, un sinónimo de falta de confianza, de baja autoestima o de inseguridad absoluta.
Y digo somos, porque yo también me incluyo en ese grupo, soy mujer, y si hay algo que debemos trabajar desde pequeñas, es como debemos proyectarnos para lograr el efecto en los demás que realmente estamos buscando.
Como profesional de la imagen y la estética, justamente lo que busco es todo lo contrario a lo que se piensa, que todas sean perfectas, que se vistan con lo mejor, lo último de la moda y unos cuantos prejuicios que existen respecto de mi profesión, nada más lejos que la superficialidad, como líder de mujeres que me buscan, que consultan sobre como verse bien para determinado evento, como cambiar su imagen o simplemente como verse mejor, tengo la obligación de primeramente hacer que vean sus atributos, que conozcan su cuerpo, su imagen y estudien qué es lo que realmente quieren mostrarle al mundo.
Gran parte de las mujeres creen que con un vestido caro, un par de zapatos de diseñador, el cuerpo de una modelo de lencería y el cabello de un comercial de tv, se tiene la vida arreglada, pero la realidad es que eso no es cierto, parte de mi trabajo es que vean como están en su interior, hay mujeres «bellisimas» exteriormente pero por dentro no irradian eso que aparentan, por tal motivo, al tener apenas unos 15 minutos de charla con esa dama, nos daremos cuenta de las carencias que tiene, de que no esta segura de su imagen, de su personalidad o de otros aspectos que denotan desconfianza en si misma.
Por el contrario, mujeres con curvas, con cuerpos reales, andan por la vida irradiando luz, mostrándose al mundo tal cual son, seguras de sí mismas, inteligentes, con facilidad para relacionarse y cualquier prenda o vestido que se pongan, lo lucen como una estrella de hollywood, ¿como se llama eso? Seguridad, autoconfianza, madurez. Esa mujer podrá lograr lo que busca, alcanzar metas, conquistar al hombre impensado y hará que cualquier mortal se dé vuelta para mirarla.
En resumen, el cambio de imagen, las ansias por arreglarse, por cambiar el estilo, por ser otra mujer, renovada y estilosa, comienza por dentro, dejando atrás complejos, situaciones que marcaron su interior, palabras que resuenan en la mente y demás situaciones difíciles de borrar, cuando se logra hacer ese click y entender que la belleza se mide según quien la mire y como la comuniquemos, muchas cosas en este mundo cambiarán.
No nos engañemos, la perfección no existe, ni las actrices, ni las modelos, ni las «referentes de belleza» gozan de ella, la perfección está en cada una y en el momento que entendamos que como nos mostremos al mundo, será como éste nos perciba y nos acepte, no existirá mujer insegura, que se tape cuando suene el flash de una cámara, ni que salga corriendo cuando se enciende una grabadora de video, simplemente se mostrarán tal cual son, y con su toque personal, lograrán conquistar lo que deseen.
Estoy segura que cada una de nosotras cuenta con ese apoyo incondicional que nos ve bellas a como dé lugar, nuestras madres, nuestros novios, nuestras mejores amigas, ni hablar de nuestro padres, (para quienes somos las princesas más bellas), pero lo mejor es contar con un especialista en belleza como lo es Dove que apoya a la mujer a verse cada día más y hermosa y que nos invita a celebrar nuestros atributos naturales, Dove no es una línea cosmética, es una aliado de nuestra imagen, no solo está comprometido con la mujer en mantener y resaltar su belleza, si no en que ésta sea natural y en enseñarnos a ver que «todas somos lindas», debemos aceptar nuestras fortaleza como grandes afortunadas, si sos petite, si sos muy alta, si tenes lindas piernas, todas tenemos algo que realzar y de lo cual sentirnos orgullosas, todas somos bellas y Dove nos ayuda a reconocerlo y a acentuarlo, no se olviden que contar con estos aliados, nos hace todo mucho más fácil, mostrarle al mundo quienes somos y lo feliz que nos sentimos con nosotras mismas.
Quiéranse, ámenense, gústense, nunca se olviden de eso, es la base del éxito en la vida. Así como las grandes celebridades y famosas no le escapan a la cámara, en la medida que sepamos quienes somos y la belleza que tenemos para enseñar, podremos dejar la timidez de lado y comernos una cámara de fotos o de video mostrándonos al mundo como las presentadoras de televisión más desinhibidas, no se trata de talento, es una mezcla de cosas, pero todo comienza en nuestra mente, creete que sos linda y llévalo con orgullo dale el ejemplo a tu niña, que te vea como una mujer superpoderosa y ella también lo sera, ¿te animas?