TABAQUISMO: UN MAL EN CRECIMIENTO
En la Argentina, aproximadamente el
30% de los adultos fuma activamente. 2 de cada 5 enfermos respiratorios
crónicos a causa del tabaco son mujeres, situación que lleva a
pronosticar que en una o dos décadas las enfermedades asociadas al
tabaquismo serán la primera causa de mortalidad y una prevalente causa
de discapacidad. Éstos son algunos de los datos que se desprenden de un
informe especial elaborado por la Fundación Cidea (Centro de
Investigación de Enfermedades Alérgicas y Respiratorias).
En el marco del ¨Día Mundial Sin Tabaco¨, el neumonólogo de la
Fundación Cidea y del Hospital María Ferrer, el doctor Ricardo del
Olmo, explica qué produce en el organismo el consumo e inhalación
de combustión de tabaco, por qué genera adicción, qué es la EPOC
y cómo enfrentarla, entre otros datos.
¨El consumo e inhalación del humo de combustión de tabaco tiene facetas
negativas en todo el organismo. Las más reconocidas son las afecciones
en el sistema respiratorio y cardiovascular; sin embargo, el daño es
general en todo el organismo. Es una enfermedad que además causa una
fuerte adicción¨, explica del Olmo, también integrante de la Asociación
Argentina de Medicina Respiratoria.
Y agrega: ¨La gente reconoce
claramente las enfermedades cardíacas y pulmonares asociadas al tabaco,
pero tiene poca información sobre: la disminución de los años de vida,
la asociación con osteoporosis sobre todo en mujeres, la asociación a
cáncer en diferentes localizaciones como pulmón, labio, lengua,
esófago, vejiga y otros, el envejecimiento prematuro, la afección
periodontal y otras de una larga lista¨.
Es importante considerar, además, que no sólo se afecta quien fuma
activamente sino también a los que lo hacen de forma pasiva y aún los
que inhalan en forma terciaria los productos nocivos que persisten en
el ambiente y depositados sobre superficies a donde pueden adherirse.
Otro aspecto a considerar es el pasaje de esas sustancias nocivas a
través de la placenta o la exposición de niños cuyos sistemas son más
vulnerables.
¨En la Argentina, aproximadamente el 30% de los adultos fuma
activamente, y a ellos hay que sumar los que lo hacen de manera pasiva.
En nuestro país es menos importante la enfermedad producida, por
ejemplo, por inhalación de humo de carbón de leña o similares, llamado
de combustión de biomasa. Esa causa es más importante en otros países o
en puntuales zonas rurales¨, sostiene el especialista.
Del Olmo también manifiesta por qué la inhalación de humo de tabaco
cumple con todas las características de una adicción: ¨La nicotina
actúa a nivel cerebral en lugares especiales llamados receptores y
produce una «recompensa», manifestada por el «placer» que manifiestan
los fumadores. Y se inicia un circuito que en la mayoría de los
fumadores lleva a dependencia física y psíquica a la nicotina, con el
desarrollo de abstinencia (nerviosismo, insomnio, irritabilidad) cuando
deja de consumir la sustancia. Como puede apreciarse muy similar a
otras sustancias adictivas. Mientras tanto, otros componentes del humo
de tabaco (hay más de 600 reconocidos químicamente) también producen
daño en el organismo¨.
Aumento del consumo del
tabaco en mujeres:
Entre las últimas estadísticas, la Argentina muestra como en otros
países un importante incremento de la tasa de enfermedad respiratoria
producida por el tabaco en general y sobre todo, en mujeres. ¨Ello se
debe al aumento del tabaquismo ocurrido en décadas pasadas en las
mujeres, igualando o incluso superando los índices masculinos. Al
momento actual, 2 de cada 5 enfermos respiratorios crónicos a causa del
tabaco son mujeres en la Argentina. Y las tasas de crecimiento son
mayores que las masculinas, por lo que no es ilógico pensar que en
pocos años habrá más pacientes mujeres que hombres enfermos a causa del
tabaco¨, alerta el Dr. Del Olmo.
Y añade: ¨Todo este incremento del uso de tabaco en la mayoría de los
países del mundo, en especial en los países en desarrollo, llevan a
pronosticar que en una o dos décadas las enfermedades asociadas al
tabaquismo serán la primera causa de mortalidad. Y no menos importante,
una prevalente causa de discapacidad¨.
Con relación a la implementación de políticas públicas para la lucha
contra el consumo de tabaco, dice: ¨Nuestro país muestra retraso.
Lentamente, se inicia la toma de conciencia sobre el importante
perjuicio económico que las enfermedades asociadas al tabaco producen,
mucho más que cualquier ingreso por impuestos o fuente de trabajo que
el tabaco pueda producir. Es así que países desarrollados con
claros objetivos de lucha contra el tabaquismo (Irlanda fue
pionera) pueden mostrar descenso no sólo de la tasa de tabaquismo sino
de las enfermedades asociadas. Por ahora nosotros estamos lejos de
ello¨.
Recomendaciones:
-Toda persona expuesta al humo de tabaco, si tiene más de 40 años y
posee síntomas respiratorios (tos crónica durante 2 meses en
otoño-invierno, sensación de falta de aire sobre todo al realizar algún
esfuerzo) pueda realizar una sencilla prueba que se llama espirometría
que puede detectar la presencia de EPOC (Enfermedad Pulmonar
Obstructiva Crónica). Esta es la afección más frecuentemente asociada
al tabaco en el sistema respiratorio. ¨Es importante el diagnóstico
temprano de esta enfermedad ya que su progresión se asocia a la
persistencia del tabaquismo. Y debemos, médico y paciente, hacer los
esfuerzos necesarios para lograr la cesación tabáquica, o sea que la
persona deje completamente de fumar. Ello ha demostrado claros
beneficios, aún con la presencia de EPOC. La intervención médica y el
uso de algunos medicamentos son de ayuda para dejar de fumar y
controlar la adicción¨.
-Para dejar de fumar, del Olmo sugiere visitar a especialistas: ¨Hay
cardiólogos, clínicos y neumonólogos muy preparados. El fumador debe
reconocer que está ante una adicción que no es sencilla en su manejo.
Con la consulta adecuada, la ayuda profesional y de algunos
medicamentos se puede lograr el abandono del consumo. Y por ello son
necesarias además políticas de Salud Pública para combatir esta
adicción que tanto daño causa (en lo personal, social y económico),
como desalentar la producción, el consumo y la venta¨.
-Con relación a los beneficios que se obtienen al dejar de fumar, el
especialista dice: ¨El abandono del tabaco está asociado a una mayor
expectativa de vida, a una mejor calidad de vida y mejoría también de
la evolución de los que ya están enfermos, por ejemplo los pacientes
con EPOC. O sea, vivir más y mejor. Y existen algunos beneficios a
corto plazo como, en algunos, la disminución de la tos, recuperar gusto
y olfato y disminuir infecciones bronquiales, tan frecuentes en los
tabaquistas¨.
EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva
Crónica)
¨La EPOC es una enfermedad subdiagnosticada a causa de la escasez de
consulta temprana de la persona que fuma y la poca realización de
espirometrías. Y el incentivo que debe existir para el correcto
diagnóstico es que existen medicamentos que usados adecuadamente pueden
disminuir los síntomas del paciente y disminuir también exacerbaciones
de la enfermedad (empeoramiento temporario del paciente con aumento de
sus síntomas) e incluso disminuir la necesidad de consultas en salas de
emergencias e internaciones¨, concluye el Dr. del Olmo.
Fuente: Fundación CIDEA (Centro de
Investigación de Enfermedades Alérgicas y Respiratorias)