Según estudios psicológicos los amigos imaginarios son producto
de la fantasía del niño debido a una carencia afectiva, de sociabilización, u
otra índole.
El hijo único o aquellos que todavía no empiezan jardín
son los más proclives a crear amigos imaginarios, que pueden estar
personificados en juguetes, algún muñeco o puede ser de fantasía. En general
los amigos imaginarios tienen una función positiva en el niño ya que surgen
como necesidad de sustituir una carencia o algo más que el niño por sí mismo no
es capaz de comunicar. Hay estudios que señalan que los niños que tienen amigos
imaginarios serán más creativos cuando sean grandes, pudiendo desempeñar alguna
actividad artística o de diseño.
Se dice
que este tipo de niños por lo general están alejados de tener conductas agresivas, aunque yo tuve una amiga
imaginaria que no recuerdo cuando tenía tres años y mi madre dice que siempre “peleábamos
por la misma muñeca”, que bueno que ella lo haya tomado como algo normal y no me
haya medicado o algo para evitar que siguiera su curso natural.
El período
natural en donde una adulto no debe preocuparse por el amigo imaginario de su
hijo es entre la edad de 3 a 6 años, cuando el niño ya está en edad escolar. Si
el fenómeno continúa y eso evita que el niño socialice de manera normal con
sus compañeros tornando al niño distante y retraído, ahí es cuando los padres
tienen que empezar a preocuparse. También deben preocuparse si el niño o si su “amigo
imaginario” se torna violento, ahí es hora de recurrir a un especialista. El
fenómeno del Amigo Imaginario es totalmente normal, no es bueno por parte de
los padres negar su existencia a los hijos ya que esto puede alentar a los
hijos a que el fenómeno se extienda en el tiempo. Es bueno sin embargo que los padres se
interesen y traten de averiguar que trata el niño de sustituir a través de su
amigo imaginario, interrogándolos acerca de su amigo imaginario de manera sutil.
Existe un dibujito animado llamado Mansión Foster para Amigos imaginarios donde
se cuentan las aventuras de un pequeño y sus diferentes amigos imaginarios.
Porque tu hijo no solo puede tener un amigo imaginario sino varios. Te
recomiendo que veas este dibujito con tu hijo si tiene amigos imaginarios y
podrás crear un lazo de comunicación más fuerte con tu hijo o hija, que tal vez
eso es lo que verdaderamente necesita.