Consejos para organizar el placard y renovar tus outfits
¿Cuántas veces te encontrás pensando en qué ponerte, mirando tu placard y sintiendo que no tenés nada para usar, cuando en verdad las prendas abundan? La organización del placard es fundamental no sólo para evitar esta sensación sino para darle máxima versatilidad a las prendas con las que cuentes porque para estar a la moda no hace falta invertir fortuna en las prendas “must” de cada temporada.
Lo principal es entender que cada mujer tiene su propio estilo y desarrolla actividades, incluyendo su trabajo, que van a moldear la composición del guardarropas. Por ejemplo, si el 80% del tiempo estamos trabajando en un ámbito formal, no tiene sentido que el 80% de nuestras prendas sean deportivas porque por más de que nos resulten sentadoras para el tipo de cuerpo y las proporciones, nunca dispondremos de suficiente tiempo para usarlas.
Del mismo modo, organizar el placard supone un trabajo de creatividad en el sentido de buscar nuevos usos a las prendas que ya tenemos porque, seamos sinceras, en varias ocasiones caemos en la comodidad de combinar una camisa solamente con un pantalón, para poner un ejemplo, pero en verdad ambas prendas permiten múltiples combinaciones. Para esto, les propongo intentar nuevas maneras y nuevos outfits con lo que ya tienen. Si esa camisa siempre la usaban con ese pantalón, ahora intenten mirar las prendas que tienen y buscar al menos tres combinaciones más. Es posible y permite que usemos las prendas con las que ya contamos, dando versatilidad y sin invertir en nuevas piezas para el guardarropas.
No hablamos de no invertir en nuevas prendas como regla sino en buscar aprovechar al máximo aquello con lo que ya contamos, y que en su momento, supuso una inversión, al menos en tiempo y dinero de nuestra parte.
Si es posible, se sugiere incorporar indumentaria o algún accesorio de temporada, para plasmar una imagen vigente y actual, pero puede ser una remera, una polera, un cinturón, pulseras o algún otro accesorio que no implique un gasto innecesario, sobre todo si sos de aquellas mujeres que dejan de usar ese complemento cuando dejó de ser tendencia.
Lo que no puede faltar en tu guardarropas
Las prendas must have son las que permiten múltiples combinaciones, de ahí su importancia. Estas prendas son:
ü Vestido negro de cocktail
ü Trench
ü Pantalones de vestir: no puede faltar un par de pantalones rectos negros de tiro medio
ü Camisas: no puede faltar una camisa blanca y otra negra
ü Polleras: como mínimo tres. El corte línea A es ideal para resaltar una figura femenina y marcar la cintura.
ü Saco o blazer
ü Vestido casual de día
ü Jeans: dos pares, uno más ajustado para marcar las curvas que podemos lucir por la noche y otro más cómodo para el día
ü Conjunto informal para tareas diarias
ü Indumentaria deportiva: sólo para la práctica de deportes
Las claves del orden
Es fundamental mantener el orden, porque si tenemos fácil acceso a las prendas, seguramente podamos pasar más tiempo mirando y analizando nuevas combinaciones que si todo estuviera ocupando tanto espacio que da la sensación de estar a punto de estallar.
Por eso, es imprescindible organizar el espacio, si es posible, usar perchas del mismo material y tono para que lo que se destaque sea la indumentaria y nada nos distraiga, y ordenar de modo tal que tengamos presente la cantidad de prendas en cada caso (camisas, pantalones, polleras, vestidos, etc).
Cada persona elige un orden que le resulta más cómodo. Algunas optan por ordenar cada tipo de prendas según color, otras por separarlas entre estampadas y lisas, y lo central es que estemos cómodas con lo que nos resulte más ordenado y adecuado para sacar provecho de las prendas que ya tenemos.
Hay prendas que podemos estar cansadas de usar y que pueden donarse, así como prendas que veamos que no resultan sentadoras por nuestro tipo de cuerpo, el estilo personal, los colores, los géneros y los cortes. No tiene sentido que las conservemos y que sigan ocupando espacio cuando sabemos que no las vamos a usar más. Si hace más de dos años que no usás una prenda, lo más factible es que no forme más parte de tu guardarropas pero, si querés evitar desecharla, intentá armar al menos tres combinaciones con otras prendas que ya tengas y usala, para que realmente sea útil y valga la pena que integre tu placard.
¿Sirve conservar prendas de otra época? Está bien conservar prendas de otros años y seguir usándolas pero debemos hacerlo con moderación. Si nos vestimos como hacíamos en otra década, la percepción de los demás es que estamos “atascadas en el tiempo” y esto puede actuar en detrimento de nuestra imagen en lo laboral principalmente. Además, si bien en la moda “todo vuelve”, los estilos se reciclan pero se aggiornan con lo que no sirve guardar prendas de otra época, salvo unas pocas que mantendremos en condiciones y seguiremos usando, combinadas con algún detalle actual para evitar esta sensación de estilo poco vigente.
Mismas prendas, nuevos usos
Una remera que te resulta muy escotada, un sweater que te encanta pero no abriga nada, una camisa hermosa pero que no te convence cómo te queda…¡y podemos seguir hasta el cansancio!
En estos casos, la clave está en probar nuevas combinaciones:
- Si no te termina de gustar cómo te queda esa camisa, podés optar por usarla sobre otra prenda, quedando la camisa abierta y dando forma a través de un cinturón.
- Si el problema es que la prenda te resulta demasiado sugerente, transparente o poco abrigada para la temporada, una salida puede ser la “superposición”: dependiendo de los lugares que frecuentes, a veces la multiplicidad de telas, colores y texturas puede ser una alternativa audaz y muy vistosa (y sobre todo, abrigada!).
- Organizar el placard puede llevarnos tiempo pero es sin dudas, una inversión en nuestra imagen, porque nos permitirá definitivamente descartar lo que no nos favorece, no es sentador o no nos sirve, de lo que realmente podemos usar para estar óptimas en todos los ámbitos que frecuentamos.
Laura Malpeli de Jordaan
Asesora de imagen certificada por Colour me Beautiful
Creadora de Styletto