La aromaterapia contra las pieles "al rojo vivo"
Por Karina Parada, Directora de Deva’s,
www.devas.com
Las pieles atormentadas por las inclemencias climáticas, la
ingesta desmedida o incorrecta de alimentos no apropiados, la exposición solar y
las afecciones propias de cada individuo son difíciles de tratar. Por lo común
requieren mucha constancia, ya que los resultados se verifican con el paso del
tiempo.
Entre los primeros pasos para el cuidado de la piel, la limpieza es
indispensable ya que ésta permite el correcto oxigenamiento del cutis y por
consiguiente una buena regeneración celular.
Cuándo? Si bien no hay una edad específica es real que las teens comienzan a
maquillarse cada vez a más temprana edad y esto tendría que venir acompañado de
las primeras limpiezas de cutis para retirar el make up, porque como ya sabemos,
con respecto a la piel, todo lo que podemos prevenir es nuestro mejor aliado.
El mercado ofrece muchas variantes de productos. En estos primeros inicios es
conveniente elegir productos livianos geles o cremas de bases acuosas-
destinados solamente a hidratar.
Hay casos que, por exceso de exposición solar u otros factores requerirán otro
tipo de productos, los cuales sería conveniente , estén indicados por una
cosmiatra o profesional competente.
No debemos olvidar que el primer cuidado que debemos dar a la piel -y esto no
excluye ninguna edad- es protegerla del sol.
Roja, y no de vergüenza
El ritmo de la vida cotidiana y el stress tan habitual en estos días se cobra la
factura en nuestro cuerpo, y la piel no queda exenta de esto, manifestándose con
distintas afecciones que pasan de una simple deshidratación, a eccemas,
dermatitis, alergias, erupciones entre otras.
Para contrarrestar estos factores, aparte de aplicar el producto específico
para la afección, podemos recurrir además a la aromaterapia para equilibrar
nuestro cuerpo-mente-espíritu de forma que el organismo recobre el equilibrio
habitual.
Con solo unas gotas en un hornillo podemos disfrutar de un aroma que relajará
nuestros sentidos y nuestro cuerpo.
Hay productos en el mercado que ya vienen con la combinación justa de aceites
vendiéndonos el efecto que buscamos, (stress, oficina, insomnio, armonización,
etc.) o bien lo podemos armar nosotros:
– Aceite esencial Lavanda: Relajante, emoliente, calmante, combate el acné,
estimula la regeneración celular.
– Aceite esencial Tea Tree: Antiséptico, bactericida, tonificante del ánimo
– Aceite esencial de Geranio: Regulador sebáceo. Reduce el stress y la tensión
nerviosa.
– Eucalipto: Descongestivo, refrescante. Aplaca los ánimos y contribuye a
relajar el ambiente.
– Azar: Alivia la ansiedad y el stress. Contribuye a regenerar las células y a
mejorar la elasticidad de la piel
También, los aceites esenciales pueden ser mezclados (1 gota en 1 ml) en aceite
vehicular (almendra, joroba, etc.) para realizar masajes
Es importante destacar que antes de utilizar cualquier aceite esencial debe
hacerse una prueba de irritabilidad. Una de las formas más segura es colocar
unas gotas de la mezcla en el antebrazo.