Como asesora de imagen debo tener una mirada muy objetiva sobre cada
clienta, cuando me piden ayuda, dejo de lado todo gusto personal y crítica
subjetiva, para convertirme en una especie de “robot” que scanea a quien tiene
enfrente y así poder buscar la mejor solución de acuerdo a lo que quiere
proyectar con su imagen.
Por supuesto mi primer paso es empatizar con la cliente, generar cierta
confianza para que se sienta cómoda y desde luego, casi siempre termino
convirtiéndome en una especie de terapeuta, cosa que adoro. A la hora de dar mi
punto de vista sobre cómo poner en práctica los cambios, y comenzar a trabajar,
vamos a los básicos de armario y luego de muchos pasos que me llevan a comenzar
mi informe final, llegamos a la conclusión de que la moda no es lo más
importante que necesita quien es asesorado.
Siempre les dijo que no se acomoden a la moda, sino que ésta debe
acomodarse a cada una de nosotras, por eso, esta dinámica de asesoría de imagen
está muy lejos de convertir a una persona en una fashionista acérrima.
Lo importante de este servicio de Asesoria de Imagen, se compone de los siguientes puntos:
Aprender a conocerse
Definir que imagen queremos proyectar a los demás
Detectar fortalezas y debilidades
Trabajar no solo el exterior sino también el interior
Analizar con que prendas contamos, sobre todo básicos de armario
Por último, incorporar por medio de una lista meticulosa, aquellas prendas de tendencia que mejor se acomodan a nosotras.
Lo bueno de la moda es que se conforma de muchas tendencias y que cada
una de nosotras tenemos una que se saca lo mejor de nosotras. No te aflijas si
no podes usar un pantalón chupín, una falda acampanada de encaje, un pantalón
de cuero, una chaqueta de terciopelo o unos stilettos de 12 cm. Hay para todas,
y de cada prenda que nos ofrece el mercado, debemos seleccionar lo que va
acorde a nuestro estilo y personalidad, a nuestro cuerpo y a nuestras
actividades.
Lo importante de esto, es no frustrarse por lo que no se puede usar,
sino alegrarse por lo que sí aporta elegancia y belleza a nuestra imagen.
Recuerden que una mujer que luce bien, es porque dentro suyo, lo sabe llevar y
está segura de quién es y de lo que busca.
Una buena imagen, no tiene porque ser sinónimo de moda, por el
contrario, una buena imagen es sinónimo de personalidad y estilo.